La polémica contratación de María Solari Caetano, esposa del exministro del Interior Rubén Vargas, ha destapado una red de conexiones entre exfuncionarios cercanos a él dentro del Ministerio del Interior (Mininter). A pesar de recibir más de S/ 120 mil por una consultoría, tanto Solari como Vargas han optado por el silencio ante los cuestionamientos.

El caso cobró relevancia luego de un reportaje del equipo de 'Milagros Leiva, Entrevista', que reveló vínculos entre dos personas del entorno de Vargas que coincidieron en el Mininter durante la polémica contratación de Solari Caetano.

Uno de ellos es José Manuel Villaorduña Aristondo, economista que trabajó con Vargas en el pasado. Aunque Villaorduña asegura que Vargas es solo un "conocido", los hechos apuntan a una relación más cercana. Cuando Vargas asumió como alto funcionario, Villaorduña fue designado como su asesor. Posteriormente, fue nombrado director ejecutivo de un proyecto ubicado en la Unidad Ejecutora N.° 037, del despacho viceministerial de Seguridad Pública del Mininter.

Esa misma unidad fue la que aprobó la contratación de Solari Caetano para una consultoría por 125 mil soles, sin dar mayores explicaciones sobre los detalles del contrato.

El segundo personaje clave es Nicolás Zevallos Trigoso, un experto en seguridad que también tuvo una estrecha relación con Vargas. Zevallos fue asesor de Vargas cuando este era viceministro de Orden Interno en 2018, y lo acompañó en varios cargos posteriores, incluido el de jefe de Gabinete de Asesores en el Mininter en 2020.

Lo que más llama la atención es que en 2021, cuando Zevallos era viceministro de Seguridad Pública, firmó la resolución que designó a Villaorduña como director ejecutivo del proyecto que luego contrató a la esposa de Vargas.

La red de conexiones entre Vargas, Zevallos y Villaorduña ha generado dudas sobre el proceso de contratación y ha avivado las críticas hacia la transparencia en el manejo de recursos en el Mininter.