El gobernador regional de Lambayeque, Jorge Pérez Flores, respondió con firmeza al anuncio del presidente del Consejo de Ministros, Gustavo Adrianzén, sobre la no renovación del contrato de concesión del trasvase Olmos.

En declaraciones públicas, Pérez instó al Ejecutivo a dejar de lado los conflictos legales o políticos y enfocarse en una salida técnica que garantice el abastecimiento de agua a miles de hectáreas agrícolas y la sostenibilidad del agroexportador en la región.

El mandatario regional advirtió que una decisión unilateral que detenga el proyecto pondría en riesgo directo a decenas de empresas y a un importante motor de desarrollo para el norte del país. “No es hora de estar en conflictos o contradicciones. Es hora de trabajar juntos para encontrar una solución que beneficie a todos”, señaló, solicitando la presencia de un equipo técnico del Gobierno central que pueda evaluar de forma objetiva el estado del proyecto Olmos.

El contrato de concesión con el Consorcio Transvase Olmos está próximo a vencer, mientras que otros factores como el arenamiento progresivo de la presa Limón y la ausencia de una adenda fundamental han generado incertidumbre sobre el futuro de esta infraestructura clave. Pérez alertó que el abastecimiento de agua para cultivos productivos y exportadores podría verse gravemente afectado si no se toman medidas inmediatas.

Frente a esta situación, el gobernador ratificó la posición del Gobierno Regional de Lambayeque de actuar con responsabilidad y promover soluciones sostenibles. “No busques en Lambayeque a otro pleitista, acá vas a encontrar soluciones”, declaró, marcando distancia de cualquier enfrentamiento político y reforzando su voluntad de diálogo con el Ejecutivo.

Finalmente, Jorge Pérez dejó en claro que Lambayeque no permitirá decisiones que comprometan su progreso y reiteró que el proyecto Olmos representa un pilar del crecimiento económico regional. Con este mensaje, el gobernador reafirma su compromiso con la defensa de los intereses de la región y la necesidad de preservar una de las obras más estratégicas del país.