En un polémico suceso ocurrido en Áncash, la fiscal Sonia Cerna Vargas ha quedado en el centro de la controversia tras dejar en libertad a tres individuos grabados en un video mientras agredían a dos agentes de la Policía Nacional.

Jorge Luis Temple, presidente de la Junta de Fiscales Superiores de Áncash, anunció que se ha solicitado una investigación disciplinaria en su contra por esta actuación considerada irregular.

Temple indicó que se enviará la información correspondiente a la Autoridad Desconcentrada de Control Interno de Áncash para que, conforme a su competencia, determine si la fiscal provincial incurrió en alguna falta grave.

De acuerdo con la reciente modificación de la Ley de la Carrera Fiscal, establecida por la Ley 32182, en casos de detenciones en flagrancia como el ocurrido, se debe solicitar la prisión preventiva de los implicados. Sin embargo, esto no fue lo que ocurrió en este caso.

El video que documenta la agresión muestra de manera contundente cómo los atacantes propinan golpes al comisario de Llamellín utilizando patadas y puñetazos. Un agente que intentó brindarle ayuda fue agredido con una pala y una correa. Pese a estos hechos evidentes, la fiscal Cerna decidió liberar a los agresores.

Patricia Tubilla, abogada especializada, comentó sobre la gravedad de la situación: “El video evidencia el uso de armas blancas en contra de un policía uniformado. Esto no solo se clasifica como lesiones leves, sino como violencia contra la autoridad, un delito tipificado en el artículo 366, que conlleva una pena de hasta doce años con los agravantes correspondientes”.