En una acción sorpresiva realizada durante la madrugada, más de 30 agentes de la División de Investigación de Alta Complejidad (Diviac) de Cañete ejecutaron un operativo simultáneo en las provincias de Chincha y Pisco, en la región Ica.

El objetivo fue capturar a los presuntos integrantes de la organización criminal conocida como “Los Duros del Sur”, dedicada al tráfico ilícito de drogas mediante la modalidad de entrega a domicilio.

La intervención fue resultado de varios meses de trabajo de inteligencia. Los policías irrumpieron en diferentes inmuebles al mismo tiempo, sorprendiendo a los miembros de la banda y evitando que intentaran deshacerse de evidencias o huir del lugar. Como resultado de la operación, once personas fueron detenidas en flagrancia.

Durante el despliegue policial se incautaron envoltorios de pasta básica de cocaína y marihuana, además de equipos de comunicación utilizados para coordinar la distribución de los estupefacientes. Según la investigación, la organización operaba imitando el sistema de reparto express, lo que les permitía trasladar la droga rápidamente y aparentar actividades lícitas.

Las autoridades indicaron que esta modalidad de microtráfico ha tenido un crecimiento sostenido en distintas ciudades del país, debido a que reduce la exposición de los delincuentes y dificulta el rastreo policial. En este caso, los involucrados habrían utilizado motocicletas y vehículos de uso cotidiano para camuflar sus operaciones.

La captura de “Los Duros del Sur” forma parte de una estrategia más amplia destinada a enfrentar el crimen organizado y el microcomercio de drogas en Ica, donde se han detectado redes con patrones operativos similares. La información recolectada en esta intervención será clave para identificar a otros posibles implicados y rutas utilizadas para abastecer la droga.

Tras la operación, la Policía Nacional reafirmó que continuará intensificando las acciones de inteligencia en coordinación con el Ministerio Público, con el objetivo de impedir que estas organizaciones se reorganizen. Las investigaciones ahora pasarán a manos de las autoridades judiciales, que deberán determinar las responsabilidades penales de los detenidos.