El colapso del puente Chancay, que dejó dos fallecidos y al menos 38 heridos, ha generado una ola de reclamos contra el ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, quien llegó al lugar del accidente en la madrugada.

Los ciudadanos y transportistas afectados exigieron explicaciones sobre el estado de la infraestructura y cuestionaron la falta de fiscalización en el mantenimiento de la vía.

Familiares de las víctimas y pobladores de la zona denunciaron que el puente presentaba signos de deterioro desde hace meses sin que se tomaran acciones preventivas. “Siempre hemos advertido que esta estructura estaba en malas condiciones, pero nunca nos escucharon”, reclamó un residente.

Pérez Reyes anunció que se realizará una evaluación técnica para determinar si la empresa concesionaria cumplió con su responsabilidad en el mantenimiento del puente. Sin embargo, las explicaciones no convencieron a los afectados, quienes exigen sanciones inmediatas y soluciones concretas para evitar nuevas tragedias.

Además del pedido de justicia para las víctimas, los reclamos se extienden a la falta de infraestructura segura en diversas rutas del país. La instalación de puentes modulares en la zona, anunciada por el ministro, ha sido recibida con escepticismo, pues los transportistas consideran que es una solución temporal que no atiende el problema de fondo.