La congresista María Agüero, de Perú Libre, es investigada por el Ministerio Público tras ser acusada de recortar los salarios de al menos 12 trabajadores en su despacho entre junio de 2022 y mayo de 2023.

Las autoridades señalaron que aún se busca identificar a otras posibles víctimas, mientras que el martes se realizó un allanamiento en su vivienda y oficinas parlamentarias, según determinación del Juzgado Supremo de Investigación Preparatoria.

Según la Fiscalía, los empleados afectados, incluidos Richard Medina, Caroline Hernández y Karlos Held, habrían entregado una parte de sus haberes a Edson Flores y César De la Cruz, exasesores de Agüero. Estos fondos supuestamente terminaron beneficiando a la legisladora, quien habría recibido directamente S/29,000 de De la Cruz. Este último habría acumulado más de S/64,000 en efectivo y transferencias, mientras que Flores percibió al menos S/44,000 de otros trabajadores.

La investigación también señala que los montos transferidos a Flores coincidían con visitas de la congresista a Arequipa, su región de representación. Durante una de estas visitas, el 19 de enero de 2023, Flores recibió un depósito de S/3,400, seguido de otro de S/5,000 en febrero, justo antes de que Agüero iniciara actividades en la zona. Flores fue detenido en Arequipa como parte del operativo, mientras que De la Cruz se encontraría en Chile y Agüero habría viajado recientemente al extranjero, posiblemente con destino a Venezuela.

El caso fue inicialmente denunciado en un reportaje de Punto Final, donde una extrabajadora afirmó que la congresista justificaba los recortes salariales bajo el argumento de que Perú Libre necesitaba fondos para gastos de "logística". La investigación también implica a Joyce Mejía, otra empleada que habría realizado transferencias para beneficio de Flores.

Por otro lado, el patrimonio de Agüero, que incluye dos propiedades en Los Ángeles valoradas en más de dos millones de dólares, ha suscitado cuestionamientos sobre su nivel de vida, que contrasta con sus declaraciones de que “los sueldos están por los suelos”. Además, la congresista ha sido criticada por mostrar en el Congreso prendas con el rostro de Vladimir Cerrón, líder de su partido y actualmente prófugo tras ser condenado por colusión.