La Comisión de Constitución del Congreso aprobó un dictamen que modifica cuatro artículos de la Constitución para cambiar el proceso de elección del presidente del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y reducir su mandato de cuatro a dos años sin posibilidad de reelección. El proyecto de ley fue aprobado con 20 votos a favor, 3 en contra y 3 abstenciones.

La reforma, denominada “Ley de reforma constitucional de los artículos 179, 180, 182 y 183 de la Constitución Política del Perú, para fortalecer la neutralidad, independencia e imparcialidad en el sistema electoral”, propone que el presidente del JNE sea elegido por los cinco miembros del Pleno, provenientes de diferentes instituciones. Anteriormente, este cargo recaía en un representante designado por la Corte Suprema del Poder Judicial. La nueva disposición establece que el presidente del JNE sea seleccionado por sus pares, asegurando una “presidencia rotativa” que fomente la alternancia en el liderazgo.

Además, el artículo 180 se modifica para especificar que los miembros del Pleno del JNE deben tener entre 45 y 70 años, sin posibilidad de reelección. Estos funcionarios mantendrán su periodo de cuatro años en el cargo, con una renovación alternada cada dos años, establecida por ley para garantizar continuidad y estabilidad en la institución.

La propuesta también afecta los cargos en la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec), acortando sus mandatos y aplicando criterios de selección similares.

La iniciativa legislativa, impulsada bajo el argumento de fortalecer la independencia y neutralidad del sistema electoral, busca alinear el método de elección del JNE con el de otras instituciones autónomas como la Corte Suprema y el Tribunal Constitucional. Según los legisladores, esta reforma es crucial para asegurar que el JNE opere de manera imparcial y con mayor autonomía.

Este cambio, de ser ratificado en el Pleno del Congreso, podría establecer un nuevo estándar en la administración de justicia electoral en el país y representa un paso hacia la renovación y autonomía de los organismos electorales en el Perú.