Una reciente encuesta de la compañía Imasen mostró que la gestión del alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, cuenta con un nivel de aprobación de 48.1% entre los ciudadanos de la capital. Sin embargo, el porcentaje de desaprobación se mantiene muy cercano, alcanzando el 44.3%, lo que refleja una opinión dividida respecto al desempeño del burgomaestre.

De cara a las elecciones municipales de 2026, el sondeo señala que el actual alcalde de Surco, Carlos Bruce, lidera las preferencias como posible sucesor en el sillón metropolitano, con un respaldo del 27.1%. En segundo lugar figura el teniente alcalde de Lima, Renzo Reggiardo, con 15.7% de apoyo ciudadano, seguido por el alcalde de Magdalena, Francis Allison, que registra un 13.4%.

El posicionamiento de Bruce y Allison no sorprende, pues ambos destacan también en la lista de los alcaldes distritales mejor valorados. Según el mismo estudio, Bruce encabeza esta categoría con un 15.3% de reconocimiento, mientras que Allison ocupa el segundo lugar con 4.7%, consolidando su visibilidad política en la capital.

La encuesta también puso en evidencia las principales preocupaciones de los limeños. La inseguridad ciudadana continúa siendo la más urgente, con un 70.2% de ciudadanos que la identifican como el principal problema de la ciudad. Le siguen el tráfico y la congestión vehicular con 36.1% y la corrupción con 34.0%, retos que representan una agenda inevitable para cualquier futuro alcalde de Lima.

En este escenario, aunque López Aliaga mantiene un nivel de aprobación relevante, el interés ciudadano por nuevos liderazgos marca la pauta de lo que podría ser una contienda electoral reñida en 2026, donde la seguridad, la movilidad y la lucha contra la corrupción se perfilan como ejes centrales del debate.