El ministro de Justicia, Juan Alcántara, informó que la Cancillería será la encargada de conformar una comisión que evaluará la posible salida del Perú de la Convención Interamericana de Derechos Humanos.

El anuncio se realizó en conferencia de prensa tras la última sesión del Consejo de Ministros, en cumplimiento del compromiso asumido por el premier Eduardo Arana durante su presentación ante el Congreso para solicitar el voto de confianza.

Alcántara precisó que la formación de esta comisión responde a una ruta ya trazada mediante un informe sectorial, y recalcó que la responsabilidad de liderar este proceso recae en el Ministerio de Relaciones Exteriores, por ser una competencia exclusiva de dicho sector. De concretarse, el retiro implicaría una salida tanto de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos como de la Corte Interamericana.

El pasado 12 de junio, el jefe del Gabinete había planteado la creación de esta comisión como una respuesta a la preocupación expresada por el Parlamento y sectores de la ciudadanía. Según Arana, el grupo estará conformado por representantes del Ejecutivo, Legislativo, sociedad civil y organismos especializados, y deberá actuar con consenso y responsabilidad ante una decisión de esta magnitud.

A pesar de esta propuesta, el propio Arana había subrayado recientemente la importancia del compromiso del Perú con el sistema interamericano, tras la elección del jurista Alberto Borea como miembro de la CIDH. Esta aparente contradicción ha generado diversas interpretaciones en el escenario político y jurídico nacional.