Petroperú, la petrolera estatal, reportó pérdidas significativas por un total de US$822.7 millones al cierre del año 2023. Esta disminución en la rentabilidad se atribuye principalmente a una caída en los ingresos, que descendieron un 28.1% hasta alcanzar los US$4,009 millones.

El informe enviado a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) señala varios factores que contribuyeron a esta situación. Entre ellos, se destaca la implementación progresiva de la Nueva Refinería Talara (NRT), que presentó desafíos operativos y generó exportaciones de residuos a precios inferiores a la adquisición de la materia prima.

Además, el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania aumentó los costos de importación, impactando negativamente en la rentabilidad de la empresa. Se observó una disminución del 10.8% en el EBITDA, que alcanzó los -US$434 millones, y un desplome del retorno sobre el patrimonio (ROE) del -10.2% al -45%.

A pesar de este panorama desafiante, Petroperú informó una mejora en enero, con un EBITDA positivo de US$29 millones gracias a la entrada plena en operación de la NRT y la reducción de costos en la compra de materia prima.