El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó el bloqueo “total y completo” de todos los buques petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela, en una nueva escalada de la política de presión contra el gobierno de Nicolás Maduro. El anuncio fue realizado a través de una publicación en Truth Social, donde el mandatario acusó a Caracas de apropiarse de activos estadounidenses y de estar vinculada a actividades como terrorismo, narcotráfico y trata de personas.
La decisión se produce una semana después de que autoridades estadounidenses incautaran un petrolero frente a las costas venezolanas, acción que Washington calificó como parte de su combate al transporte ilícito de crudo. Según Trump, Venezuela estaría “completamente rodeada” por fuerzas navales estadounidenses, y advirtió que el impacto de estas medidas será “algo nunca visto” hasta que, afirmó, se devuelvan activos supuestamente robados a Estados Unidos.
Desde Caracas, el gobierno venezolano rechazó de manera frontal la orden y anunció que denunciará el caso ante las Naciones Unidas por considerar que se trata de una grave violación del derecho internacional. En un comunicado oficial, la Cancillería acusó a Trump de intentar imponer un bloqueo naval con el objetivo de apropiarse de las riquezas naturales del país y de asumir públicamente que el petróleo y otros recursos venezolanos le pertenecen a Estados Unidos.
Washington sostiene desde hace años que el gobierno de Maduro se financia mediante la venta ilegal de petróleo y que mantiene vínculos con redes de narcotráfico. En ese marco, el ejército estadounidense ha intensificado operaciones en el Caribe y, según cifras oficiales, ataques recientes contra embarcaciones acusadas de transportar drogas han dejado más de 90 muertos desde septiembre. Venezuela, por su parte, niega esas acusaciones y afirma que se trata de una campaña para justificar la apropiación de sus recursos.
La orden de Trump se suma a una batería de sanciones adicionales impuestas en los últimos días, que incluyen restricciones contra nuevos buques petroleros, empresas vinculadas al sector energético venezolano y familiares cercanos del presidente Maduro. Asimismo, Estados Unidos ha reforzado su despliegue militar en la región, con miles de soldados y el portaaviones USS Gerald Ford operando en aguas cercanas al país sudamericano.
Las reacciones en Estados Unidos no se hicieron esperar. El congresista demócrata Joaquín Castro calificó el denominado bloqueo naval como un acto de guerra y anunció que el Congreso votará una resolución para exigir el cese de las hostilidades. Mientras tanto, Venezuela reiteró su soberanía sobre sus recursos naturales y defendió el derecho a la libre navegación y al comercio internacional, en un contexto de creciente tensión diplomática y militar entre ambos países.
Fuente: CanalB
El expresidente del Congreso,…
El Ministerio de Transportes…
El gasto en planillas del sector…
El Ministerio de Cultura recibió…
El psicólogo social Jonathan…