Este martes, 24 de septiembre, el Ministerio Público llevó a cabo una serie de allanamientos simultáneos en los domicilios de Andrés Hurtado, la fiscal Elizabeth Peralta y el empresario Augusto Miu Lei, como parte de una investigación por los presuntos delitos de lavado de activos y tráfico de influencias.

Las intervenciones, ordenadas por el Poder Judicial, se realizaron en diversos puntos de Lima y Piura.

En el caso de Hurtado, conocido como ‘Chibolín’, el allanamiento se realizó en su departamento en Miraflores. Paralelamente, en Ate y Lince, los fiscales allanaron las viviendas de Elizabeth Peralta, quien es investigada por presunto tráfico de influencias en relación con el caso. En cuanto al empresario Augusto Miu Lei, las autoridades ingresaron a sus propiedades ubicadas en Piura y Surco.

El Poder Judicial autorizó estas intervenciones tras aceptar el pedido de la Fiscalía de la Nación. Según el informe, los tres investigados estarían involucrados en una trama de tráfico de influencias y lavado de activos que incluye posibles injerencias para beneficiar a la familia Miu Lei en la devolución de oro incautado.

El allanamiento ha causado controversia, especialmente porque la resolución del Poder Judicial fue publicada en su portal hora y media antes de que las diligencias comenzaran. La Segunda Fiscalía Suprema deploró este hecho, ya que podría haber comprometido la operación.

El abogado Benji Espinoza, defensor de la fiscal Peralta, afirmó que las intervenciones “se están realizando al revés” y que su defendida ha optado por guardar silencio durante las diligencias. Por su parte, el abogado de Hurtado, Elio Riera, anunció que su cliente declarará ante la Fiscalía mañana en una sesión reprogramada tras asumir su defensa hace pocas horas.

Las investigaciones continúan, mientras las autoridades buscan esclarecer el rol de los implicados en estos delitos que han generado gran repercusión en los medios y la opinión pública.