Daniel Noboa, nuevo presidente de Ecuador, instó a la unidad y a dejar atrás viejos modelos políticos en su discurso inaugural, señalando que el país necesita enfrentar desafíos como el desempleo y la creciente violencia con un sentido de urgencia.

En su primer mensaje como mandatario tras suceder a Guillermo Lasso, Noboa destacó la necesidad de cambios inmediatos y expresó su confianza en la fuerza de la juventud. Asimismo, hizo hincapié en que su proyecto es "proEcuador" y "antinada", apuntando que los enfoques negativos tienen límites mientras que los propositivos son ilimitados.

Aunque mencionó la presunta persecución política que su familia habría enfrentado, hizo un llamado a romper el ciclo de venganzas. Noboa enfatizó la importancia de construir un nuevo camino político que trascienda las disputas del pasado.

Con este mensaje, el nuevo mandatario busca forjar un cambio de rumbo en la política ecuatoriana, apuntando hacia una visión de transformación, unidad y superación de antagonismos políticos previos.