El presidente de las rondas campesinas de Pataz, Santos Quispe, hizo un llamado al Gobierno de Dina Boluarte para proveer armas de fuego, específicamente escopetas retrocarga, con el fin de enfrentar la creciente delincuencia en la región.

En una entrevista local, Quispe recordó el papel crucial que jugaron los comités de autodefensa en la lucha contra el terrorismo décadas atrás, cuando el gobierno de Fujimori les proporcionó armas.

Argumentó que, en la actualidad, las rondas campesinas se enfrentan a la criminalidad con herramientas insuficientes mientras los delincuentes están armados. Además, destacó que muchos ronderos son militares o exmilitares y tienen experiencia en el manejo de armas.

Quispe expresó su desacuerdo con las medidas anunciadas por el gobernador regional de La Libertad, César Acuña, incluida la instalación de una nueva base militar en Trujillo. Insistió en que la región necesita una intervención más decidida para hacer frente a la delincuencia, especialmente en el distrito de Pataz, afectado por la minería ilegal.