Por Fernando Calmell del Solar, publicado en Expreso

Les pido hoy que miremos lo que nos está pasando, pero como quien ve una serie en la televisión. Esas series que sabemos tienen mucho de ciencia ficción, como cuando el protagonista se enfrenta a un ejército de zombis, mafiosos o terroristas y los vence sin siquiera despeinarse.

Lo que sucede en nuestro Perú es igual a esa serie plagada de situaciones irreales, cuyo único objetivo es entretener. Sí, la realidad real es que la estrategia caviar es exactamente esa. Han montado un espectáculo, pero no con la finalidad de entretenernos, sino con el objetivo de sembrar el pesimismo.

¿Por qué? Porque el pesimismo es el mejor aliado del populismo y es la herramienta que usan para dividirnos y crear una especie de guerra civil en nuestro pensamiento.

Ellos, los caviares, nos quieren pesimistas porque el pesimismo te paraliza, te vuelve cobarde y te desanima a luchar por el cambio que realmente quieres. Y es, justamente, el pesimismo el mundo ideal para el crimen organizado que te extorsiona y para la corrupción.

Nos quieren pesimistas para que las cosas sigan como están, para que no haya cambios, y así sigan controlando la justicia, la política, los medios de comunicación y nuestras vidas.

Hoy nos convocan a paros y protestas contra la inseguridad que ellos mismos crearon y que ellos mismos fomentan desde un sistema judicial politizado y corrupto. También a exigir que se regrese a una ley que ha fallado y que solo les sirvió a ellos para perseguir a sus enemigos políticos.

Todos sabemos quiénes persiguen a la PNP y a nuestras FFAA. Quiénes, desde sus ONGs, redactaron las leyes para que hoy vivamos aterrorizados, defendieron y liberaron a miles de terroristas y hoy se oponen a la ley de terrorismo urbano. Y quiénes son los que abren la puerta a los extorsionadores y al crimen organizado liberando a los delincuentes capturados. Sí, son ellos, los caviares y la izquierda ideológica.

Estoy seguro de que ustedes, igual que yo, no quieren seguir viendo esta serie de terror que nos quiere inmovilizar. Cambiemos de canal y seamos actores, seamos protagonistas de una nueva serie en la que todos, como patriotas, enfrentamos y vencemos a los que nos mienten, a los que no nos han dejado crecer, a los que nos han quitado la libertad de emprender y decidir sobre nuestro futuro.

Nunca lograremos ese cambio que soñamos sin esfuerzo y sin sentirnos patriotas. Solo siendo patriotas le quitaremos la máscara a estas ONGs, a estas fundaciones y políticos que nos quieren confundir y sumergir en el pesimismo absoluto, usando cualquier excusa, para así continuar robando no solo nuestras riquezas, sino también nuestra esperanza y nuestro orgullo.

No caigamos en la trampa. Cambiemos el pesimismo por patriotismo, solo así lograremos erradicar el crimen organizado, la delincuencia y a los extorsionadores.

No al pesimismo. Sí al patriotismo.