La ministra de Cultura, Leslie Urteaga, declaró que no cederá ante la presión del paro indefinido en Machupicchu, el cual protesta contra el contrato con la empresa Joinnus para la venta de boletos. Urteaga aseguró que no se volverá al sistema anterior, considerado sinónimo de corrupción.

Manifestantes exigen la anulación del contrato, pero la ministra rechazó esta propuesta y calificó el conflicto como un intento de "sacar provecho del patrimonio cultural a través del mercado negro de boletos".

A pesar de las manifestaciones y del anuncio de una mesa de diálogo para el 30 de enero, los colectivos de Machupicchu no están dispuestos a levantar el paro sin la anulación del contrato.

El alcalde de Machupicchu, Elvis La Torre Uñaccori, también expresó su rechazo a Joinnus y afirmó que la población solo levantará la huelga si se declara nulo el contrato.