Por Ántero Flores-Aráoz, publicado en Expreso

Es motivo de análisis si la situación política y social, influye en la economía, pues hay quienes piensan que van en cuerdas separadas.

Lo cierto es que la Economía es ciencia social, que además de componentes matemáticos tiene otros que nada tienen que ver con aquellos, como son las percepciones y las emociones, como también las expectativas y, ni que decir la confianza.

Como vemos no hay cuerdas separadas para la temática económica, en que lo matemático va de la mano con temas sensibles difíciles de calcular pero que influyen grandemente, sobre todo en las decisiones de inversiones.

La conflictividad política y social son dos grandes elementos que los inversores toman en cuenta para sus decisiones empresariales y ello tiene lógica razón, pues no quieren que sus capitales asuman riesgos más allá de lo razonable y que cuando hay ruido político y social, el clima para los negocios y creación de empleos se afecta.

Muchos pudiesen pensar que el ruido político proviene de los enfrentamientos entre la diversidad de agrupaciones políticas existentes, o en las controversias entre el Congreso y el Poder Ejecutivo. Pues no señor, las agrupaciones políticas están en su trabajo interno, sea para su reinscripción oficial sea para la preparación para próximos eventos electorales. En cuanto a los Poderes Legislativo y Ejecutivo, se nota claramente que no desean enfrentamientos ni tampoco agravar la situación general del país y, saben que cualquier cosa que lleve a mayores puede significar el término de sus mandatos. No desean jugársela.

Aunque parezca inverosímil, el ruido proviene de cierta prensa vocinglera y del Sistema Jurisdiccional, principalmente Ministerio Público y Poder Judicial. Los excesos en cuanto a detenciones preliminares, allanamientos e incautaciones, afectan la tranquilidad pública y social de la ciudadanía.

Mañana, tarde y noche, la prensa a la que nos referimos, está dale que dale con el tema de los “Rolex” y ni que decir de poner nombres o apelativos a ciertos grupos como “valquirias”, “waykis” y encima ponerle apellidos como “en la sombra”.

¿Creen por el amor de Dios que los allanamientos o incautaciones tendrán resultados positivos, cuando los sucesos materia de investigación ocurrieron semanas o meses ante?. La respuesta cae por si sola, es poco probable, pero el daño se hizo con el escándalo y más cuando se involucra e investiga hasta a los abogados defensores de algunos imputados.

El allanamiento del domicilio de quien ejerce la Presidencia de la República y de su hermano, son noticias internacionales que recorren todos los medios informativos, y generan resquemores frente al país.

De poco servirán los esfuerzos de nuestra Cancillería para hacer exitosa la reunión de APEC el presente año en el Perú, así como sus cónclaves preparatorios, como tampoco la designación de excelentes embajadores, cuyas tareas se verán afectadas por el ruido político y social y las decisiones jurisdiccionales exageradas e ineficientes son cabes que no tienen justificación.

Hoy por hoy, el ruido político increíblemente nace del Sistema Jurisdiccional, siendo la judicialización de la política un mal que hay que expulsar de la vida nacional. No se trata de no investigar, sino de evitar los excesos a los que nos hemos referido.